Audrey Azoulay, Directora General de la UNESCO, y Halvor Hvideberg, Embajador de Noruega ante la Unesco, firmaron el martes el primer acuerdo de cooperación trienal. En virtud de este acuerdo, Noruega aportará una contribución voluntaria de 45 millones de dólares para financiar programas de educación en todo el mundo.
Audrey Azoulay expresó su satisfacción con este excepcional acuerdo plurianual, destacando la calidad de la asociación y la confianza compartida con Noruega, así como la relevancia de los programas educativos llevados a cabo por la UNESCO.
“No puede haber paz ni desarrollo sostenible sin educación”, enfatizó Azoulay, quien agradeció la financiación de Noruega, la cual permitirá intensificar la acción de la Unesco en todo el mundo para garantizar el derecho de todos a una educación de calidad a lo largo de toda la vida.
Por su parte, Anne Beathe Tvinnereim, ministra noruega de Desarrollo Internacional, destacó la iniciativa y liderazgo de la Unesco en materia de educación. Tvinnereim elogió el papel normativo de la organización y sus programas concretos en el terreno, afirmando que la Organización es un socio muy valorado por Noruega.
Además, resaltó la importancia de la educación para lograr la reducción de la pobreza, la igualdad de género y la acción por el clima. La ministra expresó su satisfacción por aumentar el apoyo y firmar un acuerdo a largo plazo con la UNESCO, invitando a promover conjuntamente una educación de calidad para todos.
La contribución financiera de Noruega respaldará el programa de educación de la organización internacional desde 2023 hasta 2025, y potenciará significativamente sus iniciativas en áreas como la educación para la salud y el bienestar, entre otros programas. Asimismo, permitirá la ampliación del Pasaporte UNESCO de Cualificaciones para Refugiados y Migrantes Vulnerables.
Este programa, que ha sido probado con éxito en los últimos años, tiene como objetivo reconocer las cualificaciones académicas, profesionales y vocacionales previas de las personas desplazadas por la fuerza, para que puedan acceder a oportunidades de aprendizaje en el extranjero.
El apoyo del país nórdico a la UNESCO ha sido constante a lo largo de los años en temas de educación. A través de su agencia de cooperación para el desarrollo, NORAD, ha contribuido a programas operativos, principalmente en países menos adelantados y en contextos de emergencia.
Además, las inversiones noruegas han respaldado el Informe de Seguimiento de la Educación en el Mundo y el Instituto de Estadística de la Unesco, que desempeñan un papel clave en el monitoreo de los esfuerzos mundiales para alcanzar los objetivos de desarrollo sostenible en educación. También han impulsado la labor en torno a la educación sexual integral, así como el fortalecimiento de los sistemas de salud escolar y la prevención de la violencia y el acoso en las escuelas.
REDACCIÓN EDUCACIÓN