En diálogo con EL TIEMPO, Mauricio Toro, presidente de la entidad explicó los cuatro pilares del articulado del proyecto, el cual aún se encentra en proceso de elaboración.
El primero es el cambio del objeto de la entidad: “El Icetex entrará a ser una entidad financiera, pero de carácter social”, dijo el funcionario.
Esto está ligado al segundo pilar, que es la creación y definición del crédito educativo social. “Por primera vez en la historia del país dejará de catalogarse al crédito educativo como un crédito de consumo comercial. Esa diferencia garantiza que el Estado pueda entrar a subsidiar tasas de manera más rápida y efectiva, que los beneficiarios no vuelvan a tener tasas tan altas, que, como hoy sucede, los estudiantes no terminen pagando cuotas muy elevadas”.
Así mismo, se busca que permanentemente estos créditos no capitalicen intereses, que el periodo de gracia no genere intereses, que las cuotas siempre aporten principalmente a capital, y que ya no haya retención salarial a morosos.
El tercer pilar, el bienestar, busca que el Icetex tenga responsabilidad en el acompañamiento en salud mental, en articulación con Minsalud y las universidades, pero también que acompañe a los estudiantes en su inserción al mercado laboral con programas de primer empleo y convenios con organizaciones públicas y privadas.
Finalmente, el cuarto pilar de la reforma es el de la financiación de la entidad, para poder cubrir los cambios. De acuerdo con Toro, se han planteado 14 fuentes de financiación posibles que definirá Minhacienda. La idea es que, contrario a lo que ocurre hoy, Icetex sí reciba recursos del Presupuesto General de la Nación de manera directa.
REDACCIÓN EDUCACIÓN